Vivimos en la sociedad del ya. En la sociedad donde el cómo o el porqué pasa a un segundo plano siempre que sea de manera inmediata. Sus miembros priorizan los productos o servicios cuya accesibilidad y preparación sea lo más rápido posible, sea una noticia de un medio de comunicación, la contratación de un servicio de urgencia o la compra de un alimento ultra procesado de fácil preparación. Un ejemplo ideal es el de Yatekomo, una empresa cuyo producto icónico son los fideos instantáneos. Su éxito viene arraigado a estos clientes. A continuación, se muestra un ejemplo claro en el que esta empresa prioriza la velocidad de su degustación a su calidad. Es decir, importa más el qué del producto que el resto de los elementos.

Ejemplo de la generación del ya

Ante esto me pregunto si, realmente, porque vence el producto más rápido al de mayor calidad. Pero, esto viene causada por la química del cuerpo humano. La dopamina es un neurotransmisor, de la familia de la adrenalina o la noradrenalina, que está implicada con las actividades que dan gratificación instantánea. Su uso debe ser regulado, ya que sus excesos son contraproducentes. Pasaba antes con el exceso uso de la televisión y hoy con los móviles, llegando a traer consigo manía, alucinaciones o comportamientos impulsivos.

Con la accesibilidad de internet y las redes sociales y sin la correcta concienciación de estos, muchos son los niños que sufren estas consecuencias. En un estudio de la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (AVACU), afirman que casi el 70 % de los niños españoles entre 10 y 12 años usan alguna red. Al estar expuestos tan jóvenes y sin ninguna formación previa, se puede explicar como cada vez más son los miembros de la generación del ya, priorizando el qué antes que todo.

Siguiendo con el abanico de consecuencias tras estas posturas, los miembros de esta encuesta dejan de lado instintos innatos como la curiosidad, realización personal, sociales, cultuales u otros. En muchas ocasiones, quedándose en la superficie de los acontecimientos del día a día.

Meme adaptado al temario

Este meme representa a la perfección la idea de quedarse en la superficie. Cuando se entiende el motor de una acción es cuando se puede pensar en una posible solución. Durante una cita con mi psicóloga, me explicó a buscarle siempre un por qué a las cosas para encontrar la razón del hecho. Me han recomendado el nuevo libro de Carmen Mola, pero ¿por qué? Porque aquella persona qué me lo recomendó crees que tiene una reflexión o me puede dar a pensar o porque piensa que me sentiré identificado con el protagonista o cualquier otra.

Cuando pensamos en el por qué de las cosas nos ponemos a ver las cosas con perspectiva y podemos ver si realmente son positivas o negativas. Si esas acciones son buenas debemos fortalecerlas y creer mucho más en ellas. Por lo contrario, debemos eliminarlas y reemplazarlas por otras que nos sigan forjando como mejores profesionales, deportistas, amantes, familiares y, en definitiva, personas.